martes, 5 de marzo de 2013

La cultura desde Xochimilco, por Jaime Velasco Luján


GRACIAS POR SUS CORREOSOSCAR Wilde nació en Dublín, su padre fue otorrinolaringólogo (promiscuo) y su madre fue traductora. Ignoró a su padre y adoró a su madre. Su vida transcurrió en los colegios más prestigiados de Irlanda, siempre becado, hasta que llegó a la Universidad de Oxford, donde se especializó en la cultura Griega y se graduó con honores. Su obra literaria es vasta: cuentos para niños, novelas, dramas... Al final de su vida escribió dos de sus obras más conocidas: La balada de la cárcel de Reding y De profundis. Afirmó que la vida debe vivirse como una obra de arte y él la vivió así, hasta que fue encarcelado porque, a pesar de ser casado y tener 2 hijos, era amante de Bosi, la prisión le sirvió para reflexionar y encontrar el lado espiritual de la vida, de ahí la importancia de sus últimas obras, en oposición a los dramas, elegantes comedias de enredos. Al salir de la cárcel se fue vivir a París, donde terminó sus días. Las primeras obras completas que leí, cuando era joven (ya llovió), fueron las de Oscar, ellas despertaron en mí la belleza literaria. En la Prepa, analizamos El retrato de Dorian Grey, escribí un ensayo que apantalló a mi profe de Literatura, un gachupín, quien me dijo que siguiera escribiendo... BUENFIN

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