Dos historias, por Israel González

Dos historias
Israel González
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Una aborda el camino de la ficción; la otra se adentra en lo terrenal.
En “Dulces sueños, mamá” (Severin Fiala y Veronika Franz, Austria, 2014), el misterio y el horror ocurren en una casa y un ambiente propicios para ello.
En medio del campo, cerca de un lago, viven dos niños gemelos con su madre. Del padre no sabremos jamás. Pero la madre se ha sometido a una cirugía plástica de rostro y vuelve a casa con la cara vendada.
¿Es mamá, la amiga que se hace pasar por ella o es el diablo que se ha apoderado de la casa? Lo que vemos, ¿es real? ¿o nada más sucede en la mente de uno de los gemelos, puesto que el otro murió ahogado?
Lo único cierto es que el fuego devorará todo y lo único que permanece, de principio a fin, es el misterio.
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Con el simplísimo título “Ciclo” (México, 2012), Andrea Martínez Crowther recupera la memoria del viaje en bicicleta que su padre y su tío, desde Pachuca, Hidalgo, emprendieron a Canadá, en 1956.
Después de 80 días llegaron como héroes a aquel país aquellos jóvenes que, en aquel entonces, tenían la vida por delante.
La historia permanecía en fotos familiares y en periódicos de la época, hasta que en 2006, Andrea Martínez Crowther la transforma en un río vivo de imágenes que trascienden lo estrictamente personal.
En “Ciclo”, además de la hazaña de los jóvenes ciclistas, veremos cómo el tiempo transforma y deteriora todo.
Algunas historias están por concluir; otras apenas inician.