Reproduzco el monólogo del responsable de Cultura y Deportes de Xochi, después de oír mis propuestas como militante de Morena:
La historia de Xochimilco, que escribiste, es muy importante, se podría hacer en dibujos animados... No hay dinero... Me interesa realizar tu proyecto de La escuela de escritores... Podemos dar un curso sobre JEP... Ahora que ya no están los ambulantes haremos lecturas públicas en el kiosko, cada semana... Invitaremos a escritores para que impartan conferencias...
Contesté a Leonel que no cobro, si acaso, llevó un cochinito para la cooperación voluntaria. Al día siguiente llevé el cartel para la propaganda de la Escuela de Escritores, inicia en diciembre.
El libro de DGD que llevé a Porrúa ganó el Premio Nacional de Cuento, San Luis Potosí 2009, ahora está corregido y aumentado. Releí el libro parcialmente, me costó trabajo entenderlo: esa es la razón por la cual sus libros no se venden, exigen un esfuerzo del lector, por ejemplo, el cuento La lámpara de aceite del dragón de papel, trata de la muralla china y su origen, desde el punto de vista de un discípulo guiado por su Maestro...
El viernes aclaramos que en el cuento dicho, la dificultad es que se maneja 2 tiempos: el de la muralla que, si abarca todo el planeta, es circular; el otro tiempo es el de los monjes, es el tiempo lineal: tiempo circular versus tiempo normal.
En la Sociedad de Autores y Compositores de México, me llevé una grata sorpresa: el Comité Directivo, electo en absoluta libertad y democracia, presentó el informe anual del año 2015: mostraron que los ingresos superan a los egresos; hay un superávit (pensé que así debía ser en el Gobierno y recordé que lo primero que hicieron los diputados fue repartirse los Moches). La Sogem ejemplifica que las cosas se pueden hacer bien, que siempre habrá ganancias, 4 millones quizá; hay dinero disponible y van a iniciar una editorial (claro que no es lo mismo un músico o un escritor que un pinche político). El acto concluyó con la aceptación de los nuevos miembros, 15 en total: sólo 4 estuvimos presentes, a los 4 nos pidieron pasar al escenario (estábamos en un teatro) para que los asistentes nos conocieran, los demás eran jóvenes (yo solicité mi ingreso desde el 2001,cuando era joven) el aplauso que nos brindó el público asistente fue tal que no supe qué hacer y también me puse a aplaudir... Comparto esta emoción con ustedes...
Ayer llevé las películas prometidas a Cristina Granados, a las puertas de su hogar.
BUENA SEMANA
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